UN MES SIN AGUA, parroquia Marcelino Briceño, municipio Baralt, ESTADO ZULIA. Alcalde cree que en El Tigre hay camellos.

 

Samuel Contreras es oriundo de ese caserío zuliano, y ya es su segundo mandato en el cargo de gobierno local, aunque no de manera consecutiva, porque el anterior período municipal, hasta el domingo 27 de julio de 2025 lo ejerció el adeco y opositor Ramón Bracho, a quien por su buena gestión extrañan los pobladores de El Tigre.

JESÚS SEGOVIA

CNP 7.635

jesus3segovia@gmail.com

Samuel Contreras, alcalde del municipio Baralt, estado Zulia, al norte occidente de Venezuela, cree y piensa que en el caserío El Tigre hay camellos

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Es el comentario generalizado de los laboriosos y emprendedores habitantes de esa pujante comunidad de vocación agrícola y pecuaria enclavada en la parroquia Marcelino Briceño, y quienes carecen de agua potable desde la 1:30 pm del martes 21 de octubre de 2025, motivado al daño, a la avería que afectó a la bomba del acueducto rural de El Tigre.

A más de tres semanas largas, a casi un mes de ese percance mecánico, y pese a las diligencias adelantadas por los dirigentes de esa comunidad ante las autoridades municipales, hasta el sol de hoy el corregidor Contreras y su equipo de gobierno local no han resuelto el problema

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No le importa el dolor ajeno

Quienes le declararon a este periodista prefirieron reservar sus nombres y apellidos por temor a represalias políticas, que son muy comunes y las convirtieron en "el pan diario" en la Venezuela de hoy.

Sin embargo, se atreven a criticar al burgomaestre Samuel Contreras porque es su segundo mandato en el cargo municipal -aunque no de modo consecutivo-, y cuando la gente de El Tigre lo ocupa para que solvente un inconveniente que afecta a los residentes de esa comunidad rural, el hombre no arregla, no ayuda a resolver.

Recordaron que Contreras es nativo de El Tigre, criado en ese caserío del municipio Baralt, y no obstante, parece no importarle el sufrimiento y el dolor de su gente, optando por hacerse de "oídos sordos".

Extrañan al adeco Ramón Bracho

Más de uno manifestó que es muchísima la gente que en El Tigre extrañan y añoran la buena gestión del adeco y opositor Ramón Bracho, quien hasta el domingo 27 de julio de 2025, durante un período de menos de cuatro años, ocupó el puesto de alcalde del municipio Baralt.

"Con él, con Bracho en el cargo de corregidor, este percance mecánico del acueducto de El Tigre ya lo hubiesen arreglado", aseguraron.

De extrema necesidad y urgencia

Cierta y verdadera es la afirmación de que "el agua es vida" -expresan los declarantes-, y más útil es en la zona rural de El Tigre donde las familias perjudicadas recorren largas distancias a pie, en bicicletas, en motos, en carros, en tractores y hasta en burros y caballos para cargar agua de pozos saltantes, perforados por otras familias en la parroquia Marcelino Briceño.

De esa forma tan esforzada y trajinada se surten del indispensable e imprescindible líquido que es vital en los oficios del hogar y en el uso de aseo personal, además de llenar las tanquillas donde toman agua las vacas, los toros y becerros. Asimismo les sirve para limpiar los corrales donde crían los cerdos o puercos.

Este clamor ya lo han escuchado el corregidor Samuel Contreras y los funcionarios de alto rango de la Alcaldía del municipio Baralt; pero a casi un mes desde la avería de la bomba del acueducto de El Tigre, los habitantes de este caserío zuliano todavia esperan y aguardan por la solución del problema.

"Alcalde Samuel Contreras no olvide que usted nació aquí, creció aquí, estudió acá en El Tigre; así que atienda y responda las peticiones y reclamos de sus paisanos y parroquianos; mande a reparar ya la bomba dañada del acueducto de El Tigre", enfatizaron las personas que padecen por la falta de agua potable en sus hogares.

"Rodilla en tierra y clamando al Todopoderoso", le agradecen al Dios Creador porque en esta extensa temporada de lluvias les ha mandado bastante agua del cielo que es de mucho provecho para las siembras del campo, los animales, entre ellos el ganado vacuno y porcino, y las numerosas familias de El Tigre; todas trabajadoras, emprendedoras, productivas, generosas y solidarias.